Una chica de 17 años y su familia denunciaron que un boxeador amateur de unos 30 años la golpeó a la salida de un bar. La víctima tuvo que ser hospitalizada y le practicaron cuatro puntos en el rostro. A pesar de haber hecho la denuncia policial el domingo pasado, el agresor sigue en libertad.
Luciana Allen tiene 17 años y sufrió en carne propia la violencia de un hombre de unos 30 años el pasado fin de semana en Quilmes. Según detalló al portal Infocielo, el agresor que identificó como Joel Ezequiel Zalazar le estrelló la cabeza contra una pared de concreto y tuvo que ser hospitalizada.
La joven contó que el viernes 17 por la noche llegó junto a su padre a un bar de la ciudad de Quilmes y en el interior del local se encontró con su ex novio y un grupo de amigos en “estado de ebriedad”. “Llegamos para disfrutar un día con mi papá y nos encontramos con este grupo de chicos que empezó a agitarla y a insultar”, comentó Luciana a este medio a la vez que detalló que entre el intercambio de discusiones los hombres comenzaron a golpear a su padre hasta dejarlo tendido en el suelo.
“A mi papá lo tiraron al piso entre tres y le pegaron, mientras que a mí uno de ellos me estrelló la cara contra la pared mientras intentaba evitar que le peguen”, agregó la adolescente sobre el lamentable episodio.
Entre los agresores, que denunció en la Comisaría Primera de Quilmes mientras se recupera de los golpes, se encuentra Joel y Lucas Zalazar de 30 y 20 años, respectivamente, ambos boxeadores amateurs.
Desde distintas agrupaciones locales repudiaron el hecho y se solidarizaron con Luciana y mientras esperan una “respuesta” de la Justicia, acuden a las redes sociales para intentar dar con el agresor que aún está en libertad.