Ningún sector de Quilmes se salvó de las intensas lluvias.
Poco antes del anochecer de este sábado, una intensa lluvia comenzó a caer en todo el conurbano bonaerense, provocando que gran cantidad de ciudades quedaran bajo el agua.
Quilmes fue una de ellas. Solano, Bernal, La Ribera, Quilmes oeste y centro sufrieron grandes anegamientos producto del temporal, de la falta de limpieza y la falta de obras hídricas.
Desde el Municipio de Quilmes, sólo el Secretario de servicios públicos, Sergio Chomyszyn, dio una entrevista a un medio local asegurando que “Están funcionando todas las bombas de desagote, el problema que se estaba originando es que al estar el río arriba y el viento intenso provocaron la salida de su caudal, por suerte ha cambiado la dirección del viento y en horas el agua comenzará a desagotar como corresponde”.
Lo cierto es que la falta de obras en los arroyos Las Piedras y San Francisco, la falta de limpieza y la gran cantidad de vecinos que tiran basura sin cuidar la ciudad, fueron los responsables de que varios vecinos volvieran a perder muebles por la inundación.
En casi toda la zona oeste del distrito, los vecinos debieron escapar del agua como podían, por sus propios medios, ya que no hubo asistencia de ningún organismo oficial.
El mismo panorama se observaba en barrios del sur del Gran Buenos Aires (sectores de Lanús, Avellaneda y Lomas de Zamora, entre otros) y hasta en la mísmisima avenida 9 de Julio, donde el tramo entre la avenida Córdoba y la calle Viamonte, mano a Constitución, quedó convertido en una pileta.
En la zona oeste del conurbano, vecinos de Merlo -partido que se declaró en emergencia- sostuvieron que por la región pasó un tornado, aunque ello no fue confirmado por el Servicio Meteorológico.