El ministro Ritondo recordó que es un delito penado con entre dos y seis años de prisión. Por las amenazas, en el partido de Quilmes detuvieron a un docente del colegio normal, acusado de haber realizado varios llamados telefónicos.
Un joven de 19 años fue detenido el martes por realizar una amenaza de bomba en el colegio Sofía Barat. En el establecimiento, ubicado en la calle Sarmiento 2900, de la localidad de Castelar, estudia su novia. La llamada la hizo el 28 de septiembre desde su celular. Ese mes hubo casi 2 mil amenazas de bomba en escuelas de la provincia de Buenos Aires.
La Policía Bonaerense también allanó la vivienda de una mujer -donde vive con su hijo, de 17 años- que habría hecho una amenaza en el colegio donde estudian los hijos de la gobernadora bonaerense María Eugenia Vidal.
El ministro de Seguridad bonaerense, Cristian Ritondo, advirtió hoy que este tipo de llamadas anónimas «no es una broma sino un delito». De hecho, el joven, de 19 años, quedó a disposición de los fiscales de la UFI 2 de Morón, Leonardo Lisa y Ana Daniela Barrozo, que lo imputaron por «intimidación pública». Podría terminar preso entre dos y seis años.
Ritondo explicó el riesgo de las falsas amenazas: «Nuestra obligación es acudir al establecimiento con toda una logística que implica brigada de explosivos, policías y bomberos. Por este tipo de dispositivos corremos el riesgo de dejar desprotegidos a quienes realmente necesitan nuestra asistencia».
